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¡Un guiño al estilo retro!
El sofá SONNY cuenta con un magnífico tapizado de piel de vaca reutilizada que parece haber adquirido una pátina con el tiempo. Es suave y flexible al tacto, realzando las líneas básicas del sofá y confiriéndole un maravilloso efecto vintage.
SONNY es un sofá que se caracteriza por una belleza cruda, única y decidida. Combina a la perfección tanto en un salón con decoración étnica chic como en un salón de estilo loft industrial. Este sofá de 193 centímetros encaja de maravilla en cualquier lugar pequeño y en él caben cómodamente hasta 3 personas. Aúna una resistente estructura de pino, haya y aglomerado (tablero de partículas y fibra) con unos muelles. Para lograr la mejor comodidad, los cojines del asiento están rellenos de un grueso acolchado que mezcla espuma de poliuretano de alta resistencia (densidad 30 kg/m3) y guata (densidad 200 g/m2). Las cuatro patas de metal negro refuerzan el estilo industrial del sofá.
Si lo combinas con una mesa de centro de madera o metal, este sofá de cuero negro se convertirá en el protagonista de un loft vintage ultramoderno.
El sofá está listo para montar y solo hay que fijar las patas al asiento.
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