Estética y práctica a la vez, la cristalera de interior es ideal para diferenciar espacios y conservar la luminosidad de la estancia. Aporta elegancia y distribuye la luz de forma uniforme.
Estos cerramientos acristalados nacen en los talleres de artistas en el siglo XIX y darán un toque industrial a tu hogar aportando luz y separando espacios con mucho estilo.
Nuestras cristaleras son de uso interior.
Se pueden instalar en soportes de metal, madera, cemento o yeso, pero se requiere un espesor mínimo de 50mm.
Nuestros paneles están hechos de cristales encajados entre sí con cristales, son de vidrio templado ¡y son fáciles de montar!
El marco de las cristaleras es de aluminio, puede ser negro para mantener el estilo de taller original, o blanco para darle un toque moderno.
Varios anchos están disponibles para acomodar mejor y según el espacio de tu salón, cocina o cualquier otra estancia.
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